Unidad documental simple 24 - [1862]-09-27. Carta de Cecilia Böhl de Faber a Miguel Velarde

Open original Objeto digital

Área de identidad

Código de referencia

ES 28079 AAM ES-28079-AAM-A.PERS-05-03-02-24

Título

[1862]-09-27. Carta de Cecilia Böhl de Faber a Miguel Velarde

Fecha(s)

  • [1862]-09-27 (Creación)

Nivel de descripción

Unidad documental simple

Volumen y soporte

2 h. (4 p.)

Área de contexto

Nombre del productor

(1826-1913)

Institución archivística

Historia archivística

Origen del ingreso o transferencia

Área de contenido y estructura

Alcance y contenido

Carta de Cecilia Böhl de Faber ("Fernán Caballero") al coronel Miguel Velarde, ayudante de campo de S.A.R. el duque de Montpensier, en la que dice adjuntar una crónica de los festejos que se han hecho a la Reina en Andújar. Le ruega se interese por su sobrina Concha Castro, para que ella y su hija sean invitadas al próximo baile de los duques. Relata dos anécdotas de la visita de la Reina a Sevilla, donde se nombra a la marquesa de Malpica y al alcalde de Sevilla, García de Vinuesa.

TRANSCRIPCIÓN:

Mi querido y apreciado amigo:
He sido comisionada por un amigo de Andújar para que ofreciese a SS. AA. RR. la adjunta crónica de los festejos que se han hecho a su augusta hermana la Reina en Andujar, y a mi vez me tomo la libertad de traspasar a V. tan grato encargo, en ese Sanlúcar en que espero que gozarán algún más fresco que en esta Sevilla en que nos abrasamos. Por la descripción deben haber sido verdaderamente notables dichos festejos.
No se (y no extraño no saberlo) si recibió V. una esquela mía; ello es que recibí una notable y fina carta del Duque otorgándome mi petición por el pobre anciano ¡Gracias a Dios! ¡Qué de malos ratos paso yo, para que otros los pasen buenos! Y en corroboración de este aserto, voy en toda confianza y con el mayor sigilo a hacer a V. una pregunta, que espero que me contestará con toda franqueza. V. sabe que mi sobrina Concha Castro, tanto por su carácter encogido como por su estado de viuda, ha vivido siempre en un completo retiro; pero ya su hija Mercedes es grande y desea, como las demás jóvenes, disfrutar del mundo. Desde el regreso de SS. AA. RR. no ha tenido, como V. conoce, oportunidad para rogar a SS. AA. RR. que se dignasen concederle una audiencia y le honrasen con ella de la entrada en ese palacio que las Hadas disputan a San Telmo. Veo su pesar y el desconsuelo de su hija al ver que se acerca el baile que allí se ha de dar, que tiene trastornadas, no solo las cabezas de 15 años, sino las de maduros sesos. Me da lástima pues compadezco todas clases de pesares. Y me dirijo a V. para que me indique si habría algún medio por donde pudiese pedir una audiencia, aunque no fuese concedida sino en un plazo lejano, pero que diese ya pábulo a que SS. AA. RR. se dignasen convidarla a su baile. V. como "amateur" de muchachas bonitas, como amigo de los Castros, y como mi buen, mi amable y constante favorecedor podría cual no otro interesarse en este asunto tan importante para todos, pero de "vida o muerte" para una pollita que aun no sabe llorar sino bailar.
En cambio voy a contar a V. en confianza una anécdota que le hará reir. Ayer tarde estuvieron aquí las finas y excelentes Olaetas, mis íntimas amigas (cuyas preciosas sobrinas están temiendo y muertas con la idea que no serán convidadas al baile porque su madre, la Condesa de Ubaredes, estando baldada, nunca pudo tener la honra de presentarse en palacio para demostrar su respeto y adhesión a SS. AA. RR.), yo les he dicho que apostaba que las sobrinas de las excelentes tías, que tanto apreciaba S. A. R. la Infanta, y del héroe de Trafalgar, que tanto estimaba S.A.R. el Infante, no serían olvidadas por SS. AA. RR. que "todo" lo tienen presente y en particular todo lo bueno, noble, y distinguido. Pero vamos a mi anécdota: su criada, una buena pero tosca lugareña, estaba desatinada por ir a ver a la Reina. Se le logró su deseo, y cuando volvió le preguntaron: vamos, ¿qué te ha parecido?, a lo que contestó: La Reina hermosísima, pero Isabel II muy fea. ¡Mujer! ¿qué estás diciendo? Que la Reina que iba delante con su corona es moza y hermosa; pero que Isabel 2ª que iba detrás con su pelo blanco es vieja y fea. Siento que esta excelente anécdota recaiga sobre una persona de tanto mérito, La Malpica, y que por cierto no es sino muy bien parecida, porque así no se puede contar sino al oído. Corre otra anécdota que ha entusiasmado. Dícese que cuando estaba en la Giralda gozaba en mirar su Alcázar y decir que eran chicos los jardines, y que los iba a agrandar con la huerta. El pobre Vinuesa, con su acostumbrada falta de tino, escogió ese momento para pedirle que le concediese un pedazo para su inútil proyecto de agrandar el terreno de la feria. La Reina hizo un gesto de disgusto y contrariedad que hubiese bastado, no solo a un palaciego, sino a quien tuviese la menor delicadeza, para no insistir. Pero al Alcalde cursi no le bastó esa negativa e insistió diciendo, por último, que S.A.R. la Infanta decía que debía hacerlo y que la Reina, que es muy viva, contestó: que te dé la mitad de San Telmo. No bien había bajado de la Giralda, cuando volviéndose al alcalde le dijo: ya que lo desea Sevilla, concedo lo que me pides, y no bien entró en palacio cuando fue a buscar a la Infanta exclamando: hermanita, hermanita perdóname, que me impacienté y dije esto que no debí decir, que la Infanta se echó a reír y le contestó que ella no había dicho semejante cosa y que la abrazaron con el mayor cariño. Las gentes cultas están indignadas con Vinuesa, tan torpe y tan "gauche". Pero el lance es magnífico.

[sigue el texto en la parte superior de la primera página de la carta, antes del encabezamiento]:

En los días que ha estado aquí S. M. yo nada he visto de las soberbias y regias fiestas. Desde la mañana a la noche no he oído más que penas, lástimas y peticiones para que Tenorio las hiciese llegar a S. M. ¡Qué días para mí tan tristes, cansados y angustiosos! Aun tengo la cabeza trastornada, perdone V. mi descompuesta carta
Fernán

Sé que ha recibido V. un precioso regalo
27 septiembre

Valorización, destrucción y programación

Acumulaciones

Sistema de arreglo

Área de condiciones de acceso y uso

Condiciones de acceso

Condiciones

Idioma del material

Escritura del material

Notas sobre las lenguas y escrituras

Características físicas y requisitos técnicos

Instrumentos de descripción

Área de materiales relacionados

Existencia y localización de originales

Existencia y localización de copias

Unidades de descripción relacionadas

Descripciones relacionadas

Nota de publicación

Una transcripción de esta carta publicada en: Fernán Caballero: "Epistolario", tomo XIV de las Obras Completas, Madrid : Tipografía de la Revista de Archivos, 1912, pp. 242-247. Esta publicación está digitalizada en la Biblioteca Virtual de Andalucía.

Área de notas

Notas

Carta anotada con el número 42

Identificador/es alternativo(os)

Puntos de acceso

Puntos de acceso por materia

Puntos de acceso por lugar

Puntos de acceso por autoridad

Tipo de puntos de acceso

Área de control de la descripción

Identificador de la descripción

Identificador de la institución

Reglas y/o convenciones usadas

Estado de elaboración

Nivel de detalle

Fechas de creación revisión eliminación

Idioma(s)

Escritura(s)

Fuentes

Objeto digital (Ejemplar original), área de permisos

Objeto digital (Referencia), área de permisos

Objeto digital (Miniatura), área de permisos

Área de Ingreso

Materias relacionadas

Personas y organizaciones relacionadas

Tipos relacionados

Lugares relacionados